Los jóvenes salieron a la calle el pasado jueves para reivindicar un futuro ante el difícil panorama al que se enfrentan. Es la generación con mejor nivel de formación pero a la vez se enfrenta a mayores obstáculos a la hora de encontrar un empleo digno lo que hace más difícil el poder emanciparse.
Unos meses atrás un grupo de periodistas descubrió un “hallazgo” la denominada generación ni-ni, es decir jóvenes que ni estudian ni trabajan y que sirven de cobayas para ganar audiencia en los concursos sensacionalistas de nuestra tele basura.
Pero alguien se hizo la pregunta de por qué no estudian ni trabajan los jóvenes españoles, pues simplemente con pararse a pensar un minuto nos daríamos cuenta de que los jóvenes no estudian porque están totalmente desmotivados ya que tienen un currículum con una formación muy superior a cualquier trabajo que se les ofrece. Por su parte, con la crisis económica las tasas de paro entre los menores de 25 años son del 43%, con lo que es evidente que los jóvenes si quieren trabajar el problema es que no hay empleo.
La gran mayoría estudiaron máster, postgrados, idiomas... Podrían llenar un camión con títulos que luego a la hora de incorporarse al mercado laboral en muchos casos no les sirve de mucho, ya que no cuentan con experiencia laboral previa.
En este sentido, las empresas deberían tener un poco más de sentido común a la hora de publicar sus ofertas. En algunos casos se demanda una persona menor de 27 años, con máster y cinco años de experiencia... No hace falta ser muy inteligente y si haces números te das cuenta de que es prácticamente imposible...
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